La serie comienza en 2012 (justo después de los Juegos Olímpicos de verano de 2012), cuando Londres y parte del sureste han sido evacuados a raíz de un ataque nuclear durante la ceremonia de apertura de los Juegos. El gobierno se ha mudado a Manchester; Thames House ha sido dado de baja, y el MI5 se ve obligado a establecer oficinas en todo el Reino Unido en un intento por ayudar al país a evitar nuevos ataques.